Con su exposición itinerante de esculturas en papel
CARLOS MEDINA EN EL MUSEO DE CORO
Luego de haber sido inaugurada en el Museo de Arte Contemporáneo de Caracas, llega al Museo de Arte de Coro la muestra “Papeles y esculturas” del escultor Carlos Medina, la cual abre su petas al público este sábado 11 de agosto a las 6.00 pm y hasta el 21 de septiembre de 2007.
Esta selección de obras representan una manifestación didáctica en la cual el artista transporta estas piezas desde el acero hacia papel, desde formatos grandes y medianos hasta estas íntimas y esenciales creaciones.
Adicionalmente podremos apreciar una importante un trabajo que el artista ha venido desarrollando desde hace más de 12 años: las Gotas. A través de propuestas de gran escala tanto para proyectos urbanos, como para representar a Venezuela en la Bienal de Venecia, así como piezas que se manifiestan en pequeño y mediano formato desvaneciendo las bases hasta instalaciones que se presentan en manifestaciones casi espaciales, de chorros, de lloviznas… este aporte de Medina, estará también presente en el museo a través de una de sus instalaciones.
El artista recién finaliza su participación en el Primer Simposio de Escultura realizado en Margarita, en el cual ofrenda una de su “Hojas”, hojas urbanas de más de 5 metros de altura, la cual será instalada próximamente entre las de 21 escultores que participaron en este evento.
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CARTA ABIERTA A LOS TRABAJADORES DEL ATENEO DE VALENCIA POR PARTE DE LA FEDERACION DE ATENEOS DE VENEZUELA
De: Comunicaciones FEDEATENEOS (comunicaciones@fedeateneos.org)
miércoles, 08 de agosto de 2007 06:31:41 p.m.
CARTA ABIERTA A LOS TRABAJADORES DEL ATENEO DE VALENCIA POR PARTE DE LA FEDERACION DE ATENEOS DE VENEZUELA
Estimados amigos Ateneístas, trabajadores todos:
Quienes estamos actualmente a la cabeza de la Federación de Ateneos de Venezuela, somos Gente Joven, sin participación política, formados dentro del seno de los ateneos que nos han dado oportunidad de crecer profesional e individualmente e inmersos en el quehacer cultural desde hace muchos años, con un profundo espíritu ateneísta y comprometidos en un cambio de paradigmas ante las nuevas exigencias del sector cultural venezolano.
Queremos destacar que los Ateneos son y serán siempre instituciones constituidas jurídicamente como Asociaciones Civiles, es decir, instituciones privadas de carácter social, que nacieron de grupos comunitarios involucrados en ampliar el acceso al disfrute del Hecho Cultural a un mayor número de personas, de una manera constante y no dependiente de políticas gubernamentales.
Para quienes en los últimos 20 años hemos sabido cómo se ha manejado financieramente el sector Cultura de este país, no nos es ajeno el hecho de que los financiamientos han provenido tradicionalmente de los llamados subsidios otorgados por el Estado. Estos subsidios, ayer y hoy, nunca llegan puntuales sino cuando mejor les parece a quienes los otorgan o cuando en realidad pueden entregarlos. En todo caso, siempre llegan a destiempo. Tampoco es desconocido por nadie que en los últimos 8 años, los subsidios han sido "reconducidos", esto es, se han estabilizado en montos fijos que, año tras año, terminan cada vez más a la retaguardia de los ajustes inflacionarios que lógicamente se consideran en todo análisis presupuestario. Por tal razón, todos los aportes recibidos terminan siendo deficitarios para cubrir las exigencias programáticas y los gastos corrientes de las instituciones. En este sentido, jamás se podría relacionar el impago de salarios y otros beneficios, referidos a programas subsidiados por el Estado, con manejos deficientes de los recursos económicos por parte de las Juntas Directivas de las instituciones culturales y así lo expresamos con total responsabilidad.
El sector cultural, sea teatro, danza, música, literatura y, muy especialmente aquel que engloba todas estas expresiones artísticas, como lo es el que marca el accionar de los ateneos venezolanos, tradicionalmente caracterizados por la diversidad de su oferta sociocultural, ha sufrido el embate de una crisis que no merma, sino que se intensifica y que hoy por hoy se materializa de manera determinante en lo que ocurre al Ateneo de Valencia, ejemplo de una institución que, al no ser manejada por el Estado, no es considerada en su justo valor, situación que no ocurre en otros países.
La Federación de Ateneos de Venezuela, cuando se pronuncia a favor de preservar la institucionalidad del ateneo de Valencia, en ningún caso pretende defender o justificar la gestión de una Junta Directiva o un personaje en particular, sino respetar la trascendencia de una trayectoria organizacional insoslayable, y así lo declaramos. La defensa de una gestión gerencial en los ateneos sólo corresponde a las personas que jurídicamente tienen el derecho de opinar y decidir. Dichas personas son representadas en la Asamblea de Miembros de estas instituciones, y son ellas las que deben aprobar o improbar las gestiones de sus directivos. En todo caso, las irregularidades administrativas que detecten individuos o grupos de individuos afectados o preocupados por la buena marcha de los ateneos, deben ser llevadas a los tribunales destinados para ello, a fin de que estos, haciendo uso de sus atribuciones y en atención a los derechos y deberes contemplados en las leyes de la República, decidan lo más idóneo. Solo así se puede asumir una posición frente a la actuación institucional; en caso contrario, sería incurrir en difamación.
Por otro lado, consideramos que quien cercena los derechos de otros al disfrute del Hecho Cultural favorecido por una organización en particular, no respetando los mecanismos democráticos y legales de una institución, impidiendo el acceso a sus instalaciones por parte de sus autoridades naturales legalmente elegidas, politizando un problema interno haciendo llamados desde una corriente política, felicitando y justificando acciones irregulares dentro de un marco político, aún cuando pueda esgrimir a su favor años de servicio dentro de dicha organización, no puede afirmar sinceramente que defiende y ama esa institución. Nos preguntamos cuál ha sido la posición de los trabajadores del ateneo de Valencia al ver disminuido el espacio que administraba este ateneo, y si consideran que eso ayuda a resolver la problemática interna, para todos innegable.
Es nuestra posición que el Ateneo de Valencia debe buscar soluciones entre su Junta Directiva, su Asamblea de Miembros y sus Trabajadores. Los primeros deben asumir el reto de repensar los objetivos organizacionales desde la innovación y la proposición de nuevos retos. Los últimos deben entender en este momento que las soluciones económicas a sus justas reclamaciones laborales no llegarán por acto de magia, por lo que deberán poner todo su empeño en apoyar la gestión de recursos económicos ante los organismos del Estado, estimular la apertura de nuevas vías y mecanismos de financiamiento, asumiendo, asimismo, la obligación de participar en la preservación de esa historia de 71 años, aportando ideas y enfrentando desafíos, alineados con los objetivos de la organización y apoyando o estimulando la labor de una Junta Directiva en la que se vean reflejados. Creemos que asumir sin personalismos, sin politización y con el desprendimiento personal de todos los que integran el Ateneo de Valencia, significará un buen arranque para pronto salir de esta crisis.
Estamos seguros de que las aguas volverán a su cauce, que la ponderación, y la unidad volverá al Ateneo de Valencia. Cuenten con nuestra participación para favorecer mecanismos que permitan fortalecer y "refundar", tal y como ustedes proponen, una institución que a lo largo de los años ha contribuido de forma patente al desarrollo cultural de Venezuela.
Por la recuperación de la institucionalidad del Ateneo de Valencia,
La Junta Directiva.
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